Paz Maravillosa

“Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo”. Romanos 5:1

La paz de la que habla Pablo, que enumera como el primer beneficio de la salvación, es "la paz con Dios a través de nuestro Señor Jesucristo". Esta es la paz que llega al alma de quien ha confiado en Cristo como Salvador y sabe que Dios ya no tiene ningún cargo contra él, que ya no es culpable. Él sabe que Dios tenía que estar en contra de él en el pasado, mas ahora está a su favor. Él sabe que tiene una salvación que es permanente y eterna. Esta es la paz que viene porque los pecados han sido perdonados y porque todo está bien entre usted y Dios. Notará que Pablo menciona una y otra vez que tenemos paz a través de la sangre de Jesucristo, lo que significa que todo está bien entre nuestra alma y Dios. ¡Esa es la paz maravillosa!

Esto se me explicó a mí por un Pastor cuando yo era un chico en mis años de adolescencia. Él dijo que cuando el hombre pecó en el Jardín del Edén, el hombre no solo huyó de Dios -- y se encontró alejado de la vida de Dios, sin capacidad para con Dios ni inclinación para volverse a Él -- sino que Dios también se alejó del hombre. Entonces, cuando Cristo murió en la cruz, Dios se volvió, de modo que ahora un Dios santo puede decir a un pecador perdido: "Ven". Sus brazos están extendidos.

Él dice: "Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar". (Mateo 11:28). Esto es paz, el resto de la redención.

Mi amigo, Dios se ha reconciliado. No tienes que hacer nada para reconciliarte con Él. Mucha gente piensa que tienen que derramar lágrimas para reconciliarse con Dios. ¡No necesitas lágrimas para ablandar el corazón de Dios! No tienes que hacer nada.

Porque Cristo murió en la cruz, Dios se reconcilia hoy. El mensaje del evangelio es: "Sed reconciliados con Dios". El siguiente paso es tuyo. Cuando aceptas Su salvación, experimentas la paz de que tus pecados han sido perdonados.

-Dr. J. Vernon McGee, de Mensajes editados en Romanos